PREVENCIÓN DEL SIDA

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1. RECOMENDACIONES PARA LA PREVENCION DEL SIDA

El Sida o VIH es una enfermedad autoinmune de transmisión sexual o por entrada directa en la sangre de sangre infectada. No existe cura definitiva, es muy agresiva, y se deben tomar todas las medidas posibles para evitar el contagio y su difusión.

La piel impide que el virus del Sida se introduzca en el organismo, por lo tanto, para infectarse, no basta con haber estado en contacto con un fluido contaminado, es necesaria una vía de entrada en forma de herida abierta, cortadura, fisura, desgarro, o a través del contacto con las membranas mucosas.

El VIH no se transmite a través de saliva, lágrimas, sudor, orina o heces. Se transmite a través de los siguientes fluidos corporales:

• Sangre
• Leche materna.
• Fluido pre-eyaculatorio y esperma.
• Secreciones vaginales.

Para prevenir el contagio se aconseja:

1. No intercambiar jeringas o agujas con otras personas.
2. Usar agujas e instrumentos estériles o desechables para perforar la piel (tatuajes, pirsing, ..).
3. Utilizar correctamente preservativos de látex (masculino o femenino) al mantener relaciones sexuales con penetración anal o vaginal.
4. Por precaución se evitará, también, el sexo oral sin protección.
5. Las mujeres embarazadas serán tratadas y el parto será por cesárea, a fin de minimizar el riesgo de contagio al bebe. Se evitará la lactancia materna.
6. Los profesionales sanitarios extremarán las precauciones para evitar riesgo de contagio por pinchazos accidentales con agujas infectadas o por contacto con sangre u otros fluidos que contengan el VIH.
7. La sangre para las transfusiones y sus derivados, y el esperma donado serán analizados para descartar la presencia del virus.

Ante cualquier duda de posible exposición al virus, se aconseja someterse a la prueba de detección del VIH de forma inmediata, porque un diagnóstico y tratamiento precoz puede mejorar notablemente el pronóstico.